jueves, 5 de julio de 2012

EBRIO II

Marcho borracho entre los arbustos de metal
dando vueltas el barco no tiene anclaje en mi vida
el estrago hace que a las arañas le provoquen risa
mi colorido vómito que derramo en el inmenso mar

Alucino sin droga alguna, las imágenes pasan deprisa
Dios, emergiendo de una botella, quiere así entrar
a mi boca por medio de una orgiástica maldita misa
y revelarme que a su universo estaré condenado a navegar.


No hay comentarios:

Publicar un comentario